¿Qué es lo que todos tenemos que tener en
cuenta para que la convivencia del
grupo sea la mejor posible?
Considero fundamental el hecho de que los alumnos/as participen en la elaboración
de las normas para la clase en lugar
de que el maestro/a las imponga. Pero la gran duda es…¿cómo lo hacemos?, ¿realizamos
una lluvia de ideas y decidimos entre todos las normas a cumplir?, ¿los
niños/as van diciendo y el maestro/a las va apuntando?...
Yo quiero que vayamos más allá: no sólo que participen en la elaboración de las
mismas sino que también las pongamos en los momentos en los que surge la necesidad
de ello. Es decir, vamos a establecer las normas progresivamente a partir de los problemas o dificultades que vayan
apareciendo en el día a día. Por tanto, acordamos
las normas reflexionando sobre la
importancia de cumplirlas a partir de casos
reales.
Por esta razón, el cartel dedicado a ello empezó
completamente vacío y poco a poco hemos ido escribiendo nuestras normas. Y digo nuestras
porque no todos los grupos necesitarán las mismas, habrá grupos en los que la
norma de “levantamos la mano para hablar” no haga falta ponerla porque
sencillamente ya lo hacen, sin embargo habrá otros grupos en los que definitivamente
habrá que ponerla… Simplemente consiste en personalizar
las normas para cada grupo.
Cuando hice esta foto ya llevábamos unas
cuantas, pero a la semana siguiente ya teníamos tres más…
(Os
habréis dado cuenta de que junto al cartel estoy poniendo una versión con
imágenes de las normas para que el caso que tengo con rasgos de autismo las
comprenda mejor. Faltan algunas...estoy en ello...)